La ministra de Economía y Hacienda, Elena Salgado presentó la semana pasada el nuevo modelo de financiación autonómica. Muchos reglones de tinta se han escrito al respecto sobre la conveniencia del mismo, si es solidario y si por tanto procede o no su aprobación.
A continuación vamos a analizar en que consiste este nuevo modelo, sus implicaciones, así como las posturas que al respecto han tomado los dos grandes partidos, PP y PSOE.
En primer lugar para entender que se entiende por modelo de financiación autonómica tenemos que definirlo. Una posible definición se trataría que entendemos por modelo de financiación autonómica la forma que tienen la Administración central y los Gobiernos de las distintas Comunidades Autónomas de valorar cuánto dinero necesitan las comunidades para cubrir sus competencias (entre ellas servicios tan esenciales como la sanidad y educación) y con qué recursos financiar esas necesidades. Es decir, se trataría del modelo que explique como financiar los distintos servicios públicos que deben prestar las CCAA.
Para situar su importancia, hay que decir que el sistema distribuyó más de 114.000 millones de euros en el año 2007.
Otro dato importante es que en este modelo están incluidas todas las comunidades autónomas excepto País Vasco y Navarra. En el caso vasco el modelo del concierto vasco fue negociado por el gobierno de Aznar para conseguir el apoyo del PNV en su investidura.
Una vez que hemos definido lo que entendemos por modelo vamos a continuar reflexionando acerca de la necesidad de reforma del mismo. En el modelo vigente existía una previsión que reflejaba la necesidad de revisión a los cinco años de su entrada en vigor. En este sentido, hay que decir que las razones que motiva la reforma son: ampliar los recursos de las CCAA para que puedan satisfacer los servicios públicos de los que son titulares, actualizar el modelo en torno a los criterios demográficos actuales y por último la necesidad de hacer frente a los nuevos Estatutos de Autonomía aprobados en los últimos años.
En este sentido, El nuevo sistema crea un Fondo, denominado de cooperación, destinado a las regiones con menor nivel de renta (inferior al 90% de la media) y menor crecimiento de la población o menor densidad, caso de Asturias, las dos castillas o Extremadura, que de esta forma ven satisfechas sus demandas de más recursos por sus peculiaridades demográficas.
De otro lado, existe una aportación de 4.900 millones de euros que pondrá el Gobierno central a disposición de las comunidades autónomas de régimen común (todas excepto Navarra y el País Vasco) dirigido a reforzar el Estado de bienestar. Es decir, se busca compensar a las regiones donde el crecimiento demográfico ha sido mayor
El 75% de ese dinero se lo repartirán las regiones de acuerdo a la población ajustada, es decir teniendo en cuenta distintas variables (población, superficie, dispersión o estructura demográfica).
El 25% restante de ese fondo se distribuirá en función de la población que potencialmente pueda acogerse a situaciones de dependencia.
En definitiva, lo que se aprecia es que todas las comunidades van a recibir en mayor o menor medida más recursos, en todo caso necesarios para mejorar los servicios públicos. Es en este punto donde no se entiende la postura del principal partido de la oposición que denuncia que el gobierno pacta la reforma con ERC y que solo favorece a Cataluña para perjudicar al resto de España. En esto esta formación política miente pues todas la CCAA aumentan sus dotaciones. Cuestión diferente es analizar de dónde va a salir este dinero, pero si deseamos tener servicios públicos satisfactorios tenemos que entender que hay que invertir recursos en los mismos.
De otro lado, la segunda crítica al modelo que enuncia esta formación argumentando que Zapatero sólo busca acuerdos de geometría parlamentaria a cambio de dinero para Cataluña es cuanto menos paradójica. Digo esto, porque si existen modelos injustos, tendríamos que hablar del concierto vasco y del acuerdo con Navarra. Ni que decir tiene quién firmó el concierto vasco y debido a que motivos. Sin emgbargo, queridos amigos eran otros tiempos y lo que en su día serviría para “garantizar la estabilidad del gobierno de la nación” hoy es la cesión al chantaje de los independentistas catalanes. Ver para creer.