Este año me propuse darle una vuelta al blog y no sólo empezar a publicar más regularmente, sino también intentar incluir una nueva sección cultural. El primer punto creo que con excepciones he llegado a conseguirlo, pero el segundo se quedó en una declaración de intenciones. No quería acabar el año sin al menos intentarlo para tratar de que con el comienzo del año publicar algún artículo cultural de forma más o menos regular.
He dudado mucho sobre lo que escribir porque la verdad que mi ánimo no va más allá de compartir alguna reflexión sobre algo que me haya gustado o despertado mi interés. No soy crítico cultural ni mucho menos, así que no esperes una sesuda crítica.
Aprovechando que ahora todos estamos más en casa me ha parecido interesante hablar sobre una serie que descubrí por casualidad pero que ha sido de las mejores que he visto últimamente. No es una serie de reciente estreno, sino que ya van por la quinta temporada, pero estoy casi seguro que no has llegado a descubrirla.
Me refiero a la serie francesa Oficina de Infiltrados. En España tenemos todas las temporadas (incluida la estrenada en 2020) en Movistar+ por lo que es una buena opción para hacer maratón durante estas navidades. La serie trata sobre el servicio de inteligencia francés. Estamos ante una serie de espías que se aproxima a este tema de una forma muy diferente a la que solemos estar acostumbrados. Que nadie espere un James Bond francés o escenas de gran acción. La serie es muy diferente y eso es lo que la hace especial.
Tiene un reparto enormemente coral en el que además de la trama principal siempre dejan pequeñas sub-tramas con personajes que despiertan enorme interés. La serie representa la vida y el trabajo de la Dirección de Seguridad Exterior francesa y cómo deben afrontar su doble vida los agentes de inteligencia. La verdad que los guiones están muy cuidados y se tratan temas de enorme actualidad geopolítica. Especialmente, me gusta cómo refleja la dificultad de los espías para superar conflictos de interés en su trabajo y en su vida diaria. La cierto es que si te gusta la actualidad, esta serie te va a encantar porque trata aspectos como la guerra de Siria, los problemas entre servicios de inteligencia «aliados» o el enorme reto que supone para occidente la política exterior rusa.
Para terminar, te diré que hay un guiño en la serie que me encanta especialmente. Los nombres en clave de los personajes son expresiones o insultos que soltaba el capitán Haddock en los comics de Tintin. Creo que no podría haber guiño más inteligente que este. Vive La France! Y espero que disfrutes de la serie tanto como hice yo.